Uzbekistán avanza hacia la prohibición del pago en efectivo de alcohol, coches y viviendas

Antes del 1 de enero de 2026, todas las empresas comerciales y de servicios deberán implementar códigos QR de pago unificados. A partir del nuevo año, las personas jurídicas estarán obligadas a habilitar la recepción de pagos a través de un código único generado por los bancos. A partir del 1 de julio de 2026, el uso de dichos códigos será obligatorio, y su ausencia se equiparará a una infracción de las normas comerciales.

El decreto también prevé nuevos mecanismos de control fiscal. A partir del 1 de julio de 2026, las inspecciones a empresas en los ámbitos contemplados por el decreto se llevarán a cabo con el uso obligatorio de cámaras corporales. Esto se hace para impedir la injerencia injustificada en la actividad empresarial.

Los cambios también afectarán a la fiscalidad de los bienes inmuebles y de los materiales de construcción. A partir del 1 de enero de 2026, la base imponible para estos se determinará en función de su valor de mercado. Para las empresas extranjeras que vendan servicios y bienes electrónicos a ciudadanos uzbekos, se introduce un estricto requisito de registro. Si una empresa no se registra en un plazo de 30 días tras la notificación, su actividad en el país se verá restringida.

Además, se introduce una declaración experimental de ingresos. A partir del 1 de marzo de 2026, los empleados de los órganos fiscales comenzarán a presentar declaraciones anuales de la totalidad de sus ingresos. El experimento también afectará a las personas físicas registradas en las ciudades de Navoi y Chirchik.

Se presta especial atención a la importación de alimentos. La base para una inspección fiscal in situ será el almacenamiento prolongado de mercancías no vendidas. Se trata de casos en los que los productos importados no se venden durante 9 meses (para la carne y la fruta, 3 meses), y su valor residual supera las 500 unidades de cálculo base (BRV, actualmente una BRV equivale a 412.000 sum o 34 dólares).

Con estas medidas, las autoridades de Uzbekistán planean reducir en 1,3 veces el peso del sector informal en relación con el PIB de aquí a 2030. Se espera que para entonces la proporción de los pagos sin efectivo en el comercio y los servicios alcance el 75%.